La Cirugía Reconstructiva es aquella cuya finalidad principal es mejorar la calidad de vida del paciente a través de la corrección o reparación de algún defecto en su cuerpo, ya sea por un motivo estético o porque le está causando un problema en su salud.
Estos defectos o problemas pueden tener dos orígenes muy claros y podemos catalogarlos en congénitos, es decir, que acompañan al paciente desde su nacimiento, o adquiridos, ya sea por un accidente de cualquier índole o por el desarrollo de procesos tumorales.
Casos más comunes en los que se requiere Cirugía Reconstructiva
- Reconstrucción mamaria: Tras un proceso oncológico o cáncer de mama, en muchas ocasiones es necesario recurrir a una mastectomía, lo cual es muy invalidante para la mujer pues es técnicamente una amputación de un órgano, y la mama es un signo de identidad de la feminidad. Afortunadamente existen opciones de reconstrucción de la mama, y además se pueden ofrecer en la misma cirugía de mastectomía, en uno o dos tiempos, para que desde el primer momento la paciente no tenga que verse privada de la mama. Asimismo, se puede ofrecer una simetrización de la otra mama (reducción, mastopexia, aumento) para lograr el resultado más armónico posible.
- Anomalías congénitas: Muchas personas nacen con algún tipo de anomalía corporal que puede ocasionarles problemas funcionales en su día a día o producirle inseguridades o problemas psicológicos durante años. Gracias a la La Cirugía Reconstructiva podemos tratar algunos de estos problemas como microtia o ausencia de pabellón auricular; orejas en soplillo; polidactilia (dedos supernumerarios), sindactilia (dedos “pegados”), fisura palatina, por mencionar algunos ejemplos.
- Quemaduras y tumores: Dependiendo del la gravedad de la quemadura, esta puede afectar en gran medida a la calidad de vida del paciente, en estos casos es necesario extirpar el trozo de tejido dañado y reemplazarlo mediante injertos de piel del propio paciente. En el caso de algunos procesos tumorales ocurre exactamente lo mismo siendo clave para la recuperación la extirpación de los tejidos malignos y su sustitución por tejido sano.
- Traumatismos: En multitud de casos los traumatismos recibidos en accidentes de diversos tipos causan graves problemas a nivel interno en el cuerpo de los pacientes. Algunos de estos problemas los podemos solucionar gracias a una intervención quirúrgica (pequeños huesos, tendones, tejido nervioso…). Otras veces por desgracia los casos son más graves y pueden conllevar amputaciones, lesiones oculares, o traumatismos a nivel craneal o facial, en todos ellos la cirugía reconstructiva se muestra como una vía absolutamente necesaria.
Recuperación tras una Cirugía Reconstructiva
Al abarcar un abanico tan amplio de patologías los periodos de recuperación tras una intervención quirúrgica de reconstrucción pueden ir desde unas cuantas horas hasta un periodo de varias semanas realizando algún tipo de procedimiento específico. Es muy importante hablar con tu cirujano y atender a sus indicaciones en este aspecto para unos resultados óptimos tras la intervención.
Dr. Diego Navea Pérez | Cirugía Plástica, Estética y Reconstructiva en Málaga.